jueves, 14 de noviembre de 2019
Rituales
miércoles, 16 de octubre de 2019
Ruidos que acunan
viernes, 13 de septiembre de 2019
Mariquilla 1
martes, 13 de agosto de 2019
Toma de conciencia
domingo, 7 de julio de 2019
Adalberto
martes, 21 de mayo de 2019
Temporalidad
viernes, 19 de abril de 2019
Cruce de caminos - Querencia
lunes, 4 de marzo de 2019
Prueba superada
lunes, 21 de enero de 2019
España en marcha -
martes, 18 de diciembre de 2018
La huella
No, mi percepción es otra, lo que yo siento, es que cuando he estado en algún sitio y más tarde otra persona pasa por allí, le hablan de mí con agrado, reconocen y recuerdan mi calidez, mi sonrisa, el trato amable, una palabra de cariño... Y eso me gusta.
Esa es la huella que quiero dejar impresa por los senderos del alma, porque creo, que el ratito que estamos en este Planeta lo podemos hacer más amable, podemos transformar el mundo en el que vivimos, mundo, que muchos se empeñan en que sea oscuro, torpe, ruin, indefenso, febril, inhumano.
Y son unos poquitos los que hacen lo hacen así, unos poquito con mucha fuerza.
Aunque no lo creáis, nosotros tenemos la clave para cambiarlo, de nosotros depende.
Podemos hacer que cada entorno a nuestro alrededor se transforme en un lugar acogedor y cálido.
Una sonrisa no cuesta nada, es espontánea, salta a la boca, se apodera de la cara y se refleja en el rostro que nos mira.
Un abrazo a tiempo, un beso de consuelo, un gesto, una caricia... pequeñas-grandes cosas que hacen que este mundo magnífico, en el cual transitamos por corto espacio de tiempo, se convierta en un lugar más humano, amable y extraordinario.
De nosotros depende, de todos y cada uno, sin excusa. Podemos escurrir el bulto o abrir los ojos a la mañana cada día y regalar conscientes y generosos semillas de amor y consuelo, de luz y vida, de sueños y esperanza.
Empatizar con nuestros compañeros de viaje en lo bueno y en lo malo, ponernos en su lugar, reír y llorar con ellos, sin olvidar que cada momento es único e irrepetible. Para lo bueno y para lo malo también. Todos tenemos el potencial para hacerlo, disfrutad de ello conmigo y brindad al mundo lo mejor de vosotros.
La recompensa es infinitamente mayor que el esfuerzo realizado porque lo que damos nos vuelve centuplicado, y así, los colores con los que cargamos nuestra paleta son los mismos con los que el pincel universal pintará nuestro mundo.
¡Adelante pues! Juntos, todos a una, vamos a dejar huellas de sonrisas mezcladas con polvo de estrellas marcadas en el camino.
Al fin y al cabo, según dice la ciencia, el 97% de nuestro cuerpo está formado de esa materia.
lunes, 12 de noviembre de 2018
Las falsas promesas
Me engañaron. Me engañaron cuando me
dijeron: “Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja, que un
rico entre en el cielo”
Me engañaron con falsas promesas de futura
felicidad a costa del presente. Falsas promesas para constreñir el alma, para
devaluar en el mercado de la vida mis potencias, las que me fueron dadas al
nacer. Dilapidadas en aras de la obediencia, de la servidumbre a lo que decían
que estaba bien hecho, a lo que se esperaba de mí.
Me engañaron con cantos de sirena vestidos
de domingo, con falsos sermones de caminos al cielo. Me engañaron los que más
me querían, mercadeando con sentimientos, desmontando aspiraciones, clasificando
sueños.
Contrariamente a lo que me inculcaron,
creo firmemente que el dinero ¡sí da la felicidad!
Desconfiad de los que venden paraísos
inexistentes poniéndote en el brete de elegir, sopesando el ser y el tener.
Yo soy, y no tengo. He sido y, seré hasta que
la muerte me alcance. No necesito “ser”. Necesito “tener”.
Para aumentar los recursos de mi entorno
cercano, para dejar de ver necesidad y sufrimiento, para desvalijar los desvanes
del miedo al mañana desconocido y hambriento. Para reconvertir rictus de
amargura en sonrisas abiertas. Para abrigar los cuerpos ateridos con la manta
de la seguridad en el porvenir, estable, sereno.
El dinero no da la felicidad, sermonea a
diestro y siniestro nuestra católica cultura. No da la felicidad, pero...
¿Cuántos problemas se solucionan con él?
¡Cualquier situación! ¡Cualquiera! Se
suaviza con el dinero que compra calidad de vida al enfermo, que alivia
soledades, que espanta los fantasmas de la falta de educación, del hambre, del
adocenamiento.
“Poderoso caballero es Don Din Don, din
don, es Don Dinero”
Lástima que, en la idealización manipulada
de la juventud, nos mientan y nos vendan falsos paraísos de niebla a cambio de
renunciar a nuestras metas.
sábado, 13 de octubre de 2018
LO QUE ESTOY VIVIENDO (3) - SEXTO CONTINENTE - Grandes escritores te enseñan a escribir un cuento.
LO QUE ESTOY VIVIENDO (1)

LO QUE ESTOY VIVIENDO (2) - Perdidos.Un lugar para encontrar.
Perdidos.Un lugar para encontrar.
Un auténtico placer compartirlo con Demian Ortiz y todos los compañeros que se acercaron hasta Vergüenza Ajena. En la Jam de poesía leí un par de poemas. Aquí os dejo el vídeo por si os apetece escucharlos...
miércoles, 22 de agosto de 2018
Cantos de Sirena
viernes, 6 de julio de 2018
Señas de identidad
Desde su más tierna infancia Ramón había escapado de las asociaciones. Cuando todos los niños del patio se reunían formando cuadrillas él se perdía en su ensoñación particular prendido de cualquier circunstancia que llamara su atención. Podía ser la caída de una hoja que entretenía la mirada, el vuelo de un pájaro, las caprichosas formas de las nubes, o el estallido luminoso que atravesaba una rama en la perpendicular de un rayo de sol.
Su mayor seña de identidad, era la independencia. Independencia de modas, slogans, grupúsculos y corrientes de cualquier clase o manera.
Bajo su punto de vista, limitarse excluyendo al resto, era disminuir su mundo. Ceñirse a un solo arquetipo de música, a una forma de vestir o a una exclusiva forma de percibir la realidad, le hacía sentirse empobrecido. A él no le interesaban las agrupaciones que pretendían controlar el pensamiento y hacerlo común y unitario. Ramón iba más allá buscando en el encuentro con los otros una respuesta, una motivación, algo que le hiciera crecer y proyectar su esencia en múltiples y diversas facetas sin importarle qué persona se lo pudiera ofrecer ni su condición. Lo único que le interesaba eran los conceptos, la imaginación, la inteligencia desbordada en proyectos y sueños.
Para él está claro que de todo se puede aprender, tanto de lo bueno como de lo malo. De ahí que Ramón extraiga lo mejor de cada uno de ellos. Siempre hay sorpresas escondidas en todos y cada uno de los movimientos culturales, generacionales o filosóficos por muy dispares o negativos que parezcan. A Ramón le emociona descubrir individualidades dentro de la marea de seguidores de cualquier culto conveniente al poder que utiliza en su servicio a las personas gregarias seguidoras de lemas y consignas.
Nada hay blanco o negro y Ramón huye de los extremos. Disfruta la gama de grises que cualquier situación le puede ofrecer. Le ocurre igual con las personas, los países, las comidas. En todos ellos encuentra diferencias y estímulos que le aportan un disfrute, una complicidad, una pasión. De ahí su dificultad para vivir en un mundo en el cual son imprescindibles las etiquetas. De ahí su huida de grupos e imposiciones. De ahí su búsqueda de la libertad de criterio. De ahí su tranquilidad de espíritu insobornable y feliz que campa a sus anchas como un animal solitario por la estepa.
domingo, 27 de mayo de 2018
Canto al ahora
Envejecen cuando se rompen los sueños, cuando se quiebran las esperanzas, cuando se pierden las ilusiones, cuando se anclan en lo vivido olvidando el presente.
Renuncian a todo lo que suene a nuevo, obvian lo que no entienden sin hacer el más mínimo esfuerzo por comprender, por subirse al carro de la actualidad y ponderan, sin filtros, lo ya pasado quitando valor a lo que acontece.
Es el principio de la muerte neuronal, el avance de la decrepitud, la cobarde inclinación sin motivo, salvo la comodidad, a la rendición incondicional que abate aspiraciones y esperanzas, vértigos y posibilidades de interactuar con las generaciones que abren caminos al mañana.
Triste ejercito de sombras que en breve serán espectros de un pretérito inexistente, no saben apreciar la magia que se desarrolla a su alrededor con las desconocidas tecnologías y las insólitas vivencias, se dejan caer por la pendiente advenediza de los sin presente hundidos en el pantano turbio de la añoranza.
Incapaces de asumir las tendencias actuales, de compartir con la juventud sus intereses, sus entretenimientos, su realidad, sus fantasías, sus proyectos, aducen que son mucho peor que lo que ellos vivieron.
Inconscientes absolutos de que para cada uno de los seres humanos las primeras experiencias son únicas y diferentes, no importa la realidad social ni las condiciones personales o familiares, la abundancia o la escasez. El primer amor siempre dejará un rastro imborrable, el despertar de las emociones impulsadas por el bullir de las hormonas enladrillarán los derroteros de la vida, el primer juego compartido sin importar si es en la mesa sobre un tablero o frente a la pantalla del televisor pulsando los joysticks en una competición vibrante, despertará sus risas y forjará lazos indivisibles.
“Cualquiera tiempo pasado fue mejor” palabras nulas del poeta que magnifica las etapas vividas que por la distancia pierden sus aristas. Todo lo demás es complacencia en uno mismo, quedarse en la zona cómoda, señal de senectud y sometimiento.
Hay que luchar cada día por mantener enarbolada la bandera de la vida acorde al devenir de los tiempos, por seguir siendo parte de la rueda que gira, enganchados al estribo, rompiendo los desánimos que avientan en la oreja malas nuevas y acudir cada mañana al mercado del mundo, con la cesta llena, entregar y recibir con generosidad, abrir la puerta del alma y del entendimiento para, mientras que estemos aquí, poder bailar al ritmo de todas las cadencias.
Afortunados pasajeros de este tren, dejaos sorprender con cada buena noticia, responded a cada reto, abrid los ojos ante lo insólito, lo original, lo desconocido. El futuro se nos brinda a diario a través de las miradas frescas de los dueños del ahora. Olvidad los reproches y las huidas absurdas basadas en la envidia y el desconocimiento, aprovechad el impulso que encadenan las ganas de vivir, y dejaos llevar.
Indudablemente, el poder está en ellos. Nos os durmáis en los laureles del olvido y alertad vuestros sentidos. Todavía formáis parte del proceso.
viernes, 27 de abril de 2018
Resumen del mes de Abril
Algunos puntos de venta:
http://www.edicionesirreverentes.com/novisima.htm
https://www.elcorteingles.es/libros/A24786731-un-hombre-gris-y-otros-relatos-tapa-blanda-9788416107957/


