Soy como el
viento solano que esparce semillas. Como la diáspora del día que alumbra
caricias. Como el canto serrano del cantor aventurero que abarca caminos
montado en alazán de acero. Soy terremoto y pellizco que estremece tus
adentros. Soy caricia y veleidad. Constancia y desapego. Soy el final de todo y
el comienzo de algo nuevo. Soy explosión de alegría que sacude al mundo entero
y recorro con mis trinos espacios y tiempos. Como un pájaro, libre, extiendo
mis alas y emprendo el vuelo.